Compositor, clavecinista y teórico musical Francés del Barroco. Nace el 25 de Septiembre de 1683 en Dijon y muere el 12 de Septiembre de 1764. La obra lírica que comenzó a crear a sus 50 años, y que consta de 31 obras, constituye su mayor aportación musical y también marcan la transición al Clasicismo musical.
Tampoco podemos olvidar sus obras para Clavecín y que fueron interpretadas al piano en el Siglo XIX. En un principio la música de este compositor fue olvidada y a partir de la derrota Francesa en 1870, condujo a los músicos franceses a recuperar el patrimonio nacional, rescatando la música de Rameu y se emprendió el proyecto de editar todas sus obras, proyecto que no se terminó hasta 1918, con una edición de 18 volúmenes.
Su obra musical es muy amplia y variada, y podemos destacar:
Motetes
Fue durante 40 años organista profesional al servicio de varias instituciones religiosas. No era un género de su gusto y muy pocas obras se les pueden atribuir de forma clara.
Deus noster refugium
Cantatas
Fueron el primer contacto con la música lírica, ya que no se necesitaban muchos medios
L’Impatience
Música Instrumental
Es uno de los grandes maestros del clavecín, junto a Couperin. Las piezas de Rameau son menos pensadas para el clavecín que las de Couperin y tienen menos ornamentación.
Concierto nº 5 Clavecín
Música Lírica
A partir de 1733, Rameau se consagró definitivamente a la música lírica. En las partituras líricas francesas podemos distinguir 5 componentes esenciales:
- Piezas de música pura (Obertura, piezas exclusivas...). La Obertura de Rameau es de una extraordinaria variedad, incluso cuando usa el esquema francés.
Obertura Pygmalion
Arias de Danza. Los intermedios danzados le permitieron a Rameau desarrollar su sentido del ritmo, la melodía y la coreografía.
Zoroastre
Coros. A Rameau le gustaba componer coros suntuosos. Era un gran maestro en la armonía, y esto se notaba en sus composiciones.
Arias. Se usan de forma menos habitual que en la Ópera Italiana.
Tristes apprêts
Recitativos. Más próximo al airoso que al recitativo secco, donde el autor muestra mucho cuidado en el resultado de las composiciones.